Exposición al Frío 02: El Potencial de la Máquina Humana

La vida es vibración y resonancia. Todo cuerpo está formado por campos de energía y patrones de frecuencia vibratorios. Estos patrones de frecuencia son creadores de la forma.

Pitágoras dijo hace 2500 años que ‘una roca es música congelada’.

‘Lo que hemos llamado materia es en realidad energía, cuya vibración se ha reducido de tal manera que es perceptible por los sentidos’ – Albert Einstein. A su vez, su amigo David Bohm dijo que ‘la materia era luz congelada’.  Pitágoras no iba desencaminado.

Sea como fuere, lo que hemos podido empezar a vislumbrar gracias a la conocida ecuación de Einstein es que materia y energía guardan una más que estrecha relación.

El suizo Hans Jenny fue otro de esos científicos del renacimiento, pero del siglo pasado. Médico e investigador, creó lo que hoy conocemos como cimática, aplicando diferentes sonidos puros a una placa metálica cubierta de arena. Con cada frecuencia, la arena dibujaba complejas y maravillosas formas geométricas, como una estrella de mar, un doble tetraedro, etc.

Jodrell Bank es un conocido observatorio astronómico en Cheshire, al norte de Inglaterra, que ha jugado un papel importante en la búsqueda de quasars y púlsars. Alrededor de 1940, dicho observatorio recibió un extraño encargo por parte de Sir Peter Guy Manners, científico y médico inglés, inspirado por el trabajo de Hans Jenny: grabar el sonido producido por la constelación del cangrejo. Tras reproducirla a través de una placa metálica cubierta de arena, esta vibró hasta dibujar la forma de dicha constelación. ¿Ciencia ficción?

Podemos tratar de entender el Universo como un Todo del cual formamos parte. ‘Lo de arriba es como lo de abajo y lo de abajo es como lo de arriba para obrar el milagro de la Cosa Única‘, rezaba la enseñanza de Hermes Trismegisto, desde el fondo de las edades. En el Universo, la comunicación se produce a través de vibración y resonancia. Tu cuerpo, un Universo en miniatura, cumpliendo la ley hermética, no es diferente. Las ondas electromagnéticas naturales y las ondas sonoras establecen coherencia en el mensaje. Hoy sabemos que la música de los clásicos como Bach o Mozart, que es matemática pura, o los sonidos percusivos que cualquiera puede hacer con instrumentos básicos, ordenan de determinada manera el agua del cuerpo; le dan coherencia a los seres vivos. Existe una enorme diferencia en…