
La importancia de la cetosis
La cetosis es un estado metabólico necesario en el hombre. Sin ella, tal y como muestra la literatura científica, el cerebro humano y la mielinización del sistema nervioso central no serían posibles. La cetosis viene definida por la presencia suficiente de los tres cuerpos cetónicos: acetoacetato, betahidroxibutirato y acetona.
Errores comunes acerca de la cetosis
Existe un error de concepto, incluso entre quienes son conscientes de la importancia de la cetosis, y es la siguiente afirmación:
“Para estar en cetosis, hay que restringir los carbohidratos”.
Pensar de esta forma puede dar lugar a error, y de hecho esto concepto a menudo da lugar a discusiones de todo tipo y a falta de comprensión. Para ser justos con la realidad, deberíamos expresar en su lugar estos dos conceptos sinónimos:
- “Para estar en cetosis, uno debe ser efectivo ‘quemando’ el combustible principal de los mamíferos: la grasa”.
- “Para estar en cetosis, uno debe, simplemente, tener flexibilidad metabólica”.
¿Qué nos impide estar en cetosis?
Cuando una persona accede y moviliza su grasa corporal, parte de esta (hasta un 40%) es transformada en cuerpos cetónicos (Cahill et al.). Por tanto, para estar en cetosis, uno simplemente debe quemar su propia grasa saludablemente. ¿Cuál es el problema? Tras años siguiendo la aberrante y antievolutiva dieta de la pirámide, y viviendo bajo un ambiente de luz artificial (lo cual eleva la glucosa e insulina en ayunas) el hombre moderno ha perdido su flexibilidad metabólica, y por tanto, también su cetosis metabólica.
La cetosis es el estado natural del ser humano
Que los seres humanos nacen en cetosis y se mantienen así mientras siguen su dieta natural (lactancia) es un hecho experimentalmente comprobado y recogido AMPLIAMENTE en la literatura. Cuando estos empiezan a ser “alimentados” con lo que se conoce como alimentación complementaria, lo primero que se les introduce son productos No-Locales, No-Estacionales y No-Naturales (pues es la mano del hombre quien está detrás de ellos). Ahí es cuando comienza el desastre. Pero cabe señalar que esta comida antinatural, basada en papillas de cereales y frutas no locales, intervenidas y no estacionales, tan solo les minimiza la producción y el uso de cuerpos cetónicos, pues entre comidas el bebé tiene capacidad de producción dada su aún flexibilidad metabólica, superior a la de un adulto.
Tal y como citamos en los foros de la comunidad, la literatura científica demuestra que los recién nacidos y los bebés tienen 4-5 veces más facilidad para producir y utilizar cuerpos cetónicos. Incluso los bebés que toman fórmula, cargada de azúcares, siguen estando en cetosis metabólica y produciendo cuerpos cetónicos para sostener el crecimiento de su cerebro y la mielinización de su sistema nervioso. Sí que es cierto que los bebés lactantes están en cetosis más profunda que los de fórmula. Al fin y al cabo, la alimentación antievolutiva, cargada de carbohidratos, merma la flexibilidad metabólica.
En ciertos procesos donde el organismo necesita los cuerpos cetónicos, como la fiebre o los vómitos, los niños empiezan a oler a acetona. ¿Por qué? Es un síntoma de que van perdiendo flexibilidad metabólica, ya que la acetona se genera en el aliento cuando perdemos la capacidad de oxidar cuerpos cetónicos. Sin embargo, podrían recuperar dicha flexibilidad con facilidad, sino fuera porque el sistema sanitario recomienda dar refrescos azucarados para abolir dicho estado beneficioso. Esa serie de pequeños pecados en contra de la Naturaleza terminan con la flexibilidad metabólica del individuo hasta el punto de que, a día de hoy, el 97% de la población estadounidense está metabólicamente enferma.
A esto uno debe sumarle la luz artificial, quien induce la expresión de la hormona ACTH, elevando la glucosa y la insulina en ayunas y destruyendo toda habilidad de producir cuerpos cetónicos . Cuando uno utiliza azúcar y no grasa como combustible principal, acumula grasa y se oxida con rapidez.
Cómo recuperar el estado de cetosis
Si queremos recuperar el estado de cetosis bajo el que nacimos, es necesario consumir una cantidad mínima de carbohidratos y exponernos a la luz solar natural. No se trata de una cuestión de restringir carbohidratos para entrar en cetosis. El problema es que comerlos de manera anti evolutiva te vuelve inflexible metabólicamente, de tal manera que no puedes acceder al beneficioso, necesario y natural estado de cetosis.
Como mencionamos antes, en los foros de la Comunidad se habla largo y claro de ello.
4 comentarios en “Cómo entrar en cetosis”
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Mientras mas te expones al sol, de la manera en la que se viene recomendando, mas sensibles a la i nsulina somos, es por eso que incluso comiendo CH puedes permanecer en cetosis, aunado el hecho de ayunar (que es solamente comer por hambre y no por aburrimiento) genera la cetosis si eres flexible…. en fin… Gracias por tanto
Desde que me leí el libro de la dieta cetogénica de los Stro,
(que me voló mucho la cabeza, para bien) y aprendí sobre la flexibilidad metabólica, suelo permanecer habitualmente en cetosis.
A veces los compromisos sociales me sacan de ella, pero mi truco para volver es : además de recuperar la rutina de horarios y estilo de alimentación baja en CH, es ampliar la ventana de ayuno, hacer un par de días en los que cómo una sola vez al día, ( la misma cantidad que comería en el día) , pero en una franja horaria de una o dos horas.
Eso y estar al aire libre y de nuevo cetosis = mente enfocada
Mi pregunta es: qué sucede exactamente cuando esos carbohidartos que se comen no son estacionales, ni de la región donde uno habita? Seguro que tiene que ver con el espectro de luz que reciben y más cosas… pero me gustaría entenderlo profundamente. Si alguien puede explicarlo tiene mi agradecimiento.
No cabe duda que la flexibilidad metabólica necesita una atención constante, compromisos para comer carbohidratos y los mismos para no estar puntual en el exterior, son suficientes para perderla